LOS DOS BOO


Al librarse de Babidi, Boo continuó destruyendo ciudades y aterrorizando a la población por pura diversión. Se construyó una casa propia con arcilla hecha con personas transformadas con sus poderes y se dedicó a repartirse la aniquilación de la raza humana mientras esperaba a sus oponentes. Como el ejército de la Tierra no había logrado nada contra el monstruo, se decidió mandar a Mr. Satán a que acabase con él. Éste le dio bombones envenenados (que no le hicieron nada) y una "Game Poy" - bomba (que tampoco dió resultado). Mr. Satán cayó en gracia a Boo y éste le admitió como su esclavo. Boo encontró y curó un perro herido que luego llamarían Bee, esto y la amistad con Mr. Satán sacaron a relucir su lado tierno.
Tras esto Satán logró convencer a Boo de que estaba mal hacer daño a la gente por lo que este le prometió no volver a comportarse de forma violenta, pero unos bandidos que se acercaron hasta allí, dispararon a Satán y a Bee, Boo logró sanar a ambos, pero durante durante toda su existencia nunca se había tomado la molestia de controlar sus arrebatos de ira, pero haciendo un esfuerzo mantuvo su promesa y liberó su furia en forma de un humo gris; este humo en realidad era la maldad de Boo purgada de cuerpo que al separase formó en otro Boo (parecido a lo que sucedió con Picollo cuando se desprendió Piccolo Daimaku de su propio cuerpo), de aspecto más flaco y anciano que aniquiló a los bandidos si piedad.
Este nuevo Boo poseía la mayor parte del poder de Boo y absorbió al primero convirtiéndose en un nuevo Boo mas malvado que los dos anteriores, pero no quiso atacar a Satán ni al perro, porque aún mantenía recuerdos de su amistad. Logró aprender la manera de detectar el ki de las personas y se dirigió rápidamente al Palacio de Kamisama, ansioso por luchar. Mientras los pequeños entrenaban en la habitación del tiempo, Boo lanzó un poderoso ataque, con el que acabó con todos los habitantes de la Tierra (excepto Satán y Bee), y Ten Shin Han y Chaozu lograron esquivar el ataque. Luego, Piccolo logró convencerlo para que entrase en la sala, y tras un combate en el que parecía que Gotenks llevaba las de perder (en parte debido a que perdía tiempo valioso presumiendo), el Namekdestruyó la puerta de la sala para que todos quedasen encerrados. Desgraciadamente Boo logró abrir un portal dimensional por el que pudo escapar y comerse a todos los que estaban en el Palacio excepto a Dende, que escapó. Poco después lograron salir Gotenks y Piccolo.
Gotenks, convertido en Super Saiyajin nivel 3, logró poner contra las cuerdas al monstruo, y aparentemente estuvo a punto de acabar con él, pero se acabó el tiempo límite de la fusión (30 minutos). Boo en lugar de matarlos esperó a que llegase Gohan al cual había detectado y al que en realidad quería enfrentarse (había luchado con Gotenks para entretenerse y atraerlo).
Pronto se vio la superioridad de Gohan, Boo ideó entonces un plan: esperar a que pasase una hora para que se puedan fusionar en Gotenks nuevamente y absorberlos, ya que estaba recibiendo una paliza por Gohan, que había venido del otro mundo entrenado por el Anciano Kaio Shin, quien había liberado su poder oculto. Viendo Boo que le sería imposible derrotarlo en ese estado absorbió a Gotenks y a Piccolo, obteniendo así un poder e inteligencia superior, sobrepasando al de Gohan con creces. Cuando Boo iba a darle el golpe de gracia, Son Gokū, vuelto a la vida gracias a Rō Kaiō Shin, se transportó a la Tierra y cortó a Boo con un Kienzan con la intención de fusionarse con Son Gohan usando los pendientes Potara, tuvieron una pequeña batalla en la que Goku iba a perdiendo, pero de repente Boo sufrió una pérdida enorme de poder, al agotarse el tiempo de la fusión, con este poder insuficiente para enfrentar a Gohan o a Goku absorbió a Gohan obteniendo más poder que nunca.

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